La ley de Servicios Digitales (LSA), que regula las plataformas en línea en la UE, entró en vigor el 17 de febrero de 2024. La LSA protege a los usuarios de contenidos, bienes y servicios ilegales, y garantiza sus derechos en las plataformas, así como, establece nuevas responsabilidades para las plataformas, como la transparencia, la moderación de contenidos y el recurso a mecanismos de apelación. Además, crea coordinadores nacionales de servicios digitales y una junta europea para supervisar y hacer cumplir las normas.
Por otro lado, el Parlamento Europeo ha presentado un documento en el que se analiza el alcance global del enfoque de la UE hacia la transformación digital. En el documento se indica que la aproximación de la UE a la transformación digital se basa en la protección de los derechos fundamentales, la sostenibilidad, la ética y la equidad. Con esta visión centrada en las personas de la economía y sociedad digital, la UE busca empoderar a ciudadanos y empresas, sin importar su tamaño.
Según la UE, internet debe seguir siendo abierto, justo, inclusivo y orientado a las personas. Las tecnologías digitales deben beneficiar a los ciudadanos y ayudarles a participar en la sociedad. Las empresas deben competir en igualdad de condiciones, y los consumidores deben confiar en que se respeten sus derechos.
La Comisión Europea ha publicado recientemente estrategias y planes de acción y ha propuesto varias regulaciones digitales, como la Ley de Inteligencia Artificial, el Acta de Servicios Digitales y el Acta de Mercados Digitales.